«‘BOTERO’: Cuando la danza se convierte en escultura viva para celebrar 85 años de Bellas Artes»
En el corazón de Santo Domingo, donde el arte late con la fuerza de siglos de tradición, el Ballet Nacional Dominicano alza el telón de un hito histórico: el estreno de «BOTERO», una obra coreográfica que rinde tributo al icónico artista colombiano Fernando Botero. Este espectáculo, con dirección de Stephanie Bauger y coreografía de Annabelle López Ochoa, no sólo marca el inicio del Mes Internacional de la Danza sino que celebra los 85 años de la Dirección General de Bellas Artes (DGBA) con un lenguaje visual revolucionario. Tras triunfar en escenarios de Colombia, Canadá y Latinoamérica, la obra llega al Teatro Nacional Eduardo Brito el 3 de abril, fusionando volúmenes escultóricos, música original y una narrativa que desafía las fronteras entre la danza y las artes plásticas.
**1. Un Legado de 85 Años: La DGBA y su apuesta por la vanguardia artística
La Dirección General de Bellas Artes, fundada en 1939, ha sido pilar fundamental en la democratización cultural de República Dominicana. Para su aniversario 85, eligió una obra que encapsula su misión: «BOTERO», un ballet que rompe moldes al integrar danza contemporánea, diseño protésico y crítica social. «Celebrar con ‘BOTERO’ es honrar nuestra historia mientras miramos al futuro. Queremos que el público vea el ballet no como un arte estático, sino como un espejo de nuestra realidad», explica Stephanie Bauger, directora del Ballet Nacional.
El proyecto, respaldado por el Ministerio de Cultura, refleja también una colaboración internacional sin precedentes: una alianza con el Ballet de Medellín, cuyo director ejecutivo Julián Acosta, facilitó la transferencia tecnológica y artística para adaptar la obra al contexto caribeño.

**2. La coreografía de Annabelle López Ochoa: Un diálogo entre cuerpos y volúmenes
Annabelle López Ochoa, coreógrafa belga-colombiana reconocida por obras como «Frida» y «A Streetcar Named Desire», ha tejido en «BOTERO» un relato donde los bailarines se convierten en esculturas en movimiento. Inspirada en la sátira visual del maestro Botero, la obra explora temas como la opulencia, la identidad latinoamericana y la fragilidad humana.
«No se trata de replicar sus cuadros, sino de capturar su esencia: esa ironía que cuestiona el poder y celebra lo cotidiano», detalla López Ochoa. Los movimientos, fluidos pero cargados de tensión, simulan las curvas exageradas características del «Boterismo», mientras la música original de Juan Acosta —una mezcla de ritmos folclóricos colombianos y armonías sinfónicas— guía al espectador por un viaje emotivo que oscila entre la comedia y la tragedia.

**3. Vestuario escultórico: El desafío de convertir tela en arte tridimensional
Si hay un elemento que define «BOTERO», es su vestuario, una hazaña de ingeniería textil dirigida por la diseñadora Diana Echandía. Cada traje, creado manualmente por un equipo de 30 artistas, transforma a los bailarines en figuras que emulan las esculturas del colombiano:
- Pantalones con 75 piezas: Mientras un pantalón convencional usa 6-8 piezas, los de la obra requieren patrones complejos con varillas de soporte y seda termoformable para permitir movimientos como pirouettes o grands battements.
- Máscaras y tocados protésicos: Elaborados con silicona y resinas, estos elementos —inspirados en obras como «Caballos»— se moldean directamente sobre moldes de yeso para lograr precisión anatómica.
- Paleta cromática boteriana: Tonos tierra, rojos intensos y azules profundos extraídos de pinturas como «La Familia Presidencial» o «Mujer Fumando».
«Fue un proceso de ensayo-error: probamos materiales por meses hasta lograr que los volúmenes no limitaran la danza», confiesa Echandía, quien incluso cosió personalmente varios tocados. «Botero no pintaba ‘gordos’, sino proporciones que narran historias. Eso quisimos transmitir».

**4. Tecnología y tradición: Los aliados tras la producción
La puesta en escena es un crisol de innovación y herencia cultural:
- Escenografía modular: Piezas intercambiables que recrean paisajes urbanos y rurales de la obra boteriana, desde plazas coloniales hasta mercados bulliciosos.
- Documental detrás de cámaras: El fotógrafo oficial Nelson Maita capturó el proceso creativo en Medellín, material que se estrenará en abril como testimonio de esta colaboración binacional.
- Apoyos estratégicos: Arajet (aerolínea oficial), Sodança (zapatillas de punta) y Seguros Sura respaldan una producción que ya es referente en Iberoamérica.
**5. Cómo vivir la experiencia «BOTERO»: Fechas, boletas y proyección internacional
- Fecha clave: Jueves 3 de abril, 8:00 PM, en la Sala Principal del Teatro Nacional Eduardo Brito.
- Compra de boletas: Disponibles en boleteria.com.do o en taquilla. Precios desde RD1,500(platea)hastaRD1,500(platea)hastaRD4,000 (VIP con acceso a encuentro con el elenco).
- Recomendación: Adquiere tus entradas con anticipación —el 70% se vendió en preventa— y participa en los conversatorios post-función con los creadores.
«BOTERO» no es solo un ballet: es un manifiesto sobre cómo el arte trasciende formatos y geografías. Entre el legado de la DGBA y la audacia de una generación de artistas que desafían lo establecido, esta obra confirma que la danza puede ser —como diría Botero— «una rebelión silenciosa». ¿Listo para ser parte de esta celebración? Las butacas del Teatro Nacional aguardan; el telón está por subir.