Investigadores chinos han encontrado que las infecciones asintomáticas de la neumonía COVID-19, causada por el nuevo coronavirus SARS-CoV-2, tienen una respuesta inmune más débil en comparación con las sintomáticas.
Un equipo de expertos de la Universidad Médica de Chongqing investigó a 37 pacientes asintomáticos con edades entre los ocho y los 75 años, los cuales eran mantenidos en cuarentena en el Hospital Popular de Wanzhou de la municipalidad de Chongqing, en el suroeste de China.
El equipo descubrió que la duración media de la excreción viral, es decir el intervalo entre el primer y el último resultado positivo en las pruebas nasofaríngeas, entre los casos asintomáticos fue de 19 días, cinco más que los 14 días usuales entre los pacientes con síntomas leves de las 37 personas sintomáticas que fueron seleccionadas como grupo de control, según los resultados de la investigación, que fueron publicados en la revista Nature Medicine.
Tanto en la fase aguda (el período en el que se puede encontrar el ARN viral en una muestra respiratoria) como en la fase de convalecencia temprana (ocho semanas después de recibir el alta médica), el nivel de IgG, un anticuerpo específico para la COVID-19, entre los casos asintomáticos, era significativamente menor que el de los casos sintomáticos.
Además, 30 casos asintomáticos experimentaron una disminución en los niveles de anticuerpos neutralizantes en la fase de convalecencia temprana, mientras que esta disminución se observó en solo 23 casos sintomáticos.
Los resultados de la investigación indican que, en comparación con los casos sintomáticos, los asintomáticos tuvieron una respuesta inmune más débil a la COVID-19.
El descubrimiento de la disminución en IgG y en el nivel de anticuerpo neutralizante en la fase de convalecencia temprana puede contribuir a las estrategias de inmunidad y a los análisis serológicos, según el equipo de investigación.