Los jugadores de rugby irlandeses que ganan más de 25.000 euros anuales (más de 28.000 dólares) aceptaron una rebaja del 10% de sus salarios para la segunda mitad de 2020, así como un recorte del 10% en 2021, como consecuencia de la crisis provocada por la pandemia del nuevo coronavirus.
El acuerdo fue anunciado este lunes por la Federación Irlandesa de Rugby (IRFU), que llevaba varias semanas negociando con la asociación de jugadores Rugby Players Ireland (RPI).
La reducción podría aplicarse también al primer semestre de 2020 si las pérdidas sufridas por la IRFU son mayores de las previstas.
«Irish Rugby, como todas las entidades deportivas, las empresas y la sociedad en general, se ha visto severamente impactada por la crisis en curso del COVID-19, con una gran preocupación por nuestros ingresos financieros futuros», admitió el director general de la IRFU, Philip Browne.
«La IRFU, las provincias y los clubes siguen estando en una situación altamente precaria, lo que hace que sea muy importante el acuerdo alcanzado», añadió.
Al contrario que en Inglaterra, donde la rebaja salarial fue muy criticada por los jugadores, el sindicato irlandés destacó «la buena relación de trabajo» con la Federación como punto clave para alcanzar el acuerdo.
Las cuatro provincias irlandesas de Leinster, Munster, Ulster y Connacht volverán a jugar en agosto en el marco del Pro 14.