En su reunión de política monetaria del mes de agosto de 2020, el Banco Central de la República Dominicana (BCRD) dispuso la reducción en 50 puntos básicos de su tasa de interés de política monetaria, pasando de 3.50 % a 3.00 % anual.
En adición, decidió estrechar el corredor de tasas de interés, al disminuir la tasa de interés de la facilidad permanente de expansión de liquidez (Repos a 1 día) de 4.50 % a 3.50 % anual, mientras que la tasa de interés de depósitos remunerados (Overnight) se mantiene en 2.50 % anual. De esta forma, el corredor de las facilidades permanentes de liquidez del Banco Central tendrá un rango de ± 50 puntos básicos con respecto a la tasa de política monetaria.
La decisión sobre la tasa de referencia se basa en el análisis exhaustivo del impacto de la pandemia del COVID-19 sobre la actividad económica y la evolución futura de la inflación. En particular, la variación mensual del Índice de Precios al Consumidor en julio fue de 1.88 %, mientras que la inflación acumulada durante los primeros siete meses del año fue 2.32 %. Por otro lado, la inflación interanual, es decir, de julio de 2019 a julio de 2020, alcanzó 4.35 %, situándose dentro del rango meta de 4.0 % ± 1.0 %, al tiempo que la inflación subyacente, que refleja las condiciones monetarias, alcanzó 4.14 %.
En ese sentido, el sistema de pronósticos del BCRD y las expectativas de los agentes económicos señalan que las presiones inflacionarias recientes son de carácter transitorio, asociadas a la evolución de los precios de algunos alimentos y de la recuperación en el precio internacional del petróleo, por lo que se prevé que la inflación se mantendría dentro del rango meta de 4.0 % ± 1.0 % en el horizonte de política monetaria.
En el entorno internacional prevalece una alta incertidumbre, asociada al ritmo de recuperación económica global y al hecho de que el número de nuevos contagios a nivel mundial aún permanece elevado. En efecto, Consensus Forecasts (CFC), estima en sus proyecciones del mes de agosto una contracción de la economía mundial de -4.7 % para el año 2020, similar a la estimación más reciente del FMI de una caída de -4.9 %.
En respuesta a este debilitamiento de la actividad global, los bancos centrales alrededor del mundo continúan reduciendo sus tasas de interés de política monetaria y ampliando las medidas de flexibilización monetaria, con el objetivo de apoyar la demanda interna de sus países.
Para Estados Unidos de América (EUA), nuestro principal socio comercial, Consensus estima que la actividad económica se contraería durante el presente año, al pasar de una expansión de 2.2 % en 2019 a una disminución de -5.2 % en 2020.
En este contexto, la Reserva Federal se mantiene aplicando un grupo de medidas monetarias expansivas, previéndose que su tasa de política monetaria (tasa de fondos federales) se mantendría en el rango de 0 % y 0.25 % hasta el año 2022, al tiempo que implementa programas de flexibilización cuantitativa basados en la provisión de liquidez a través de Repos, compras de títulos públicos y privados en el mercado secundario y programas de canalización de crédito para las micro, pequeñas y medianas empresas, principalmente de los sectores salud y educación.
Adicionalmente, el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, anunció cambios en los objetivos de política monetaria, otorgando una mayor prioridad a la generación de empleos y permitiendo que la inflación se ubique en el mediano plazo por encima de la meta para compensar los periodos prolongados de baja inflación que se registraron previo a la pandemia.