Con la presencia del presidente de la República, Luis Abinader Corona, quedaron oficialmente iniciados los trabajos del Global Industrial & Logistic Park, un parque de zona franca con una inversión de US$28 millones, orientado principalmente a la industria de productos médicos, farmacéuticos, electrónicos, eléctricos y empresas de servicios complementarios para este sector.
El discurso de orden del acto, al que también asistió la vicepresidenta de la República, Raquel Peña, lo pronunció el ingeniero Luis López, presidente de la empresa, quien dijo que su grupo empresarial comparte la idea del mandatario de que es el momento de invertir en el país.
López inició sus palabras con la pregunta: ¿tiene sentido invertir ahora en tiempos de crisis? A continuación dijo que la respuesta de los desarrolladores del parque es: “Sí, este es un momento para las inversiones inteligentes”.
La crisis, dijo, “nos afecta a todos, pero la vida sigue. Creemos en nuestro país, porque estamos convencidos de que es el momento de invertir en sectores que ofrecen una oportunidad en el escenario económico internacional”.
Explicó que la experiencia con el Global Industrial & Logistic Park, confirma su visión, porque están iniciando la construcción y ya su primer edificio está contratado, y con sólo la promoción inicial y colocación en Internet, se negocian contratos para varios edificios.
Es posible, dijo López, que esto se deba a las características innovadoras como parque industrial y de servicios para empresas con tecnología de nivel medio y alto, dedicadas a la fabricación de artículos médicos, farmacéuticos, eléctricos y componentes electrónicos; y también proveedores de servicios logísticos que forman parte de la cadena productiva de exportación.
Ocupa un terreno de 140 mil metros cuadrados con capacidad, para un total de 80 mil metros cuadrados solo en naves industriales, proyectado para completarse en 8 años, aunque –manifestó- la demanda que se está registrando hace ver el futuro con optimismo. Es un proyecto que generará más de 10 mil empleos directos.
El sector de zonas francas en nuestro país, relató López, inicialmente estuvo muy centrado en la actividad textil, “pero ha evolucionado a una estructura más diversificada incluyendo actividades de mayor valor agregado y sofisticación”.
Hoy las fábricas del sector textil, analizó, representan el 17% mientras que el 27% se dedica a producir dispositivos médicos y el 17% a los artículos electrónicos y eléctricos, sumando el 4% dedicada a calzados y el 9% a joyería, “vemos el importante cambio registrado en la última década”, destacó.
Esto explica, dijo, la capacidad de adaptación de las zonas francas a la crisis provocada por la pandemia. El cierre de la producción industrial de marzo provocó una caída del 40% de las exportaciones en abril pasado en comparación con ese mismo mes del 2019, pero ya en junio el sector se había recuperado y sus exportaciones apenas estaban un 4% por debajo de lo exportado en el mismo periodo del año pasado, y en este septiembre las exportaciones alcanzaron un record histórico.