La Primera Sala de la Cámara Penal de la Corte de Apelación del Distrito Nacional será el escenario este lunes para examinar la apelación a las medidas de coerción impuestas a Raúl Rizik Yeb, acusado de violencia de género contra la empresaria Alexandra Mejía Arcalá, su ex esposa y presidenta del Grupo Mejía Arcalá.
La Oficina del Juzgado de Atención Permanente del Distrito Nacional, mediante su resolución 0668-2023-SMDC-02361, justificó la prisión preventiva para Rizik Yeb por la gravedad de las acusaciones y el riesgo que representa para la integridad de la víctima.
El tribunal demostró que la libertad de Rizik Yeb podría poner en peligro tanto la investigación como la seguridad de Alexandra Mejía Arcalá. La medida de tres meses fue descrita como «la más idónea al proceso» para proteger a la víctima.
Los jueces Doris Pujols, Rafael Báez, Yndira Vásquez y Carmen Mancebo serán los encargados de evaluar la apelación a la resolución 0668-2023-SMDC-02361. El tribunal de primera instancia fundó la decisión de prisión preventiva destacando la seriedad de las acusaciones y el patrón de abuso y violencia registrado contra Mejía Arcalá.
Entre las pruebas presentadas se encuentran testimonios detallados y materiales probatorios que respaldan un patrón continuo de agresiones físicas y verbales, incluyendo amenazas con armas de fuego. El tribunal también ponderó el impacto psicológico en la víctima como un factor crucial en su decisión de salvar la integridad de Mejía Arcalá y asegurar una justicia efectiva.
El Ministerio Público subrayó la gravedad de las acciones de Rizik Yeb, describiéndolas como «hechos delictivos graves y destructivos». La fiscalía argumentó que «la prisión preventiva es la única medida de coerción adecuada», enfatizando la necesidad de reparar el daño causado y proteger a la víctima.
La sentencia detalla el historial de agresiones de Rizik Yeb, incluyendo amenazas de muerte, agresiones físicas y verbales en diversos contextos y lugares. Estos actos reflejan un patrón constante y severo de violencia, motivando al tribunal a optar por la prisión preventiva.
La decisión de la Corte de Apelación no solo impactará en el caso específico, sino que también será un indicador del compromiso del sistema judicial dominicano en la lucha contra la violencia de género.
Cabe destacar que Rizik Yeb, tras ser detenido, evadió a las autoridades por más de dos meses luego de dictarse una orden de conducción en su contra. La decisión de la Corte de Apelación será determinante no solo para el caso en sí, sino también para la percepción de la sociedad sobre la protección contra la violencia de género por parte del sistema judicial dominicano.