San Juan, Puerto Rico – La noche del pasado sábado , el Coca-Cola Music Hall se convirtió en el escenario de un homenaje emotivo y vibrante, que celebró el legado de uno de los más grandes íconos de la música tropical: Johnny Ventura.
Bajo la dirección de su hijo, Jandy Ventura, el espectáculo “Johnny Vive” se presentó como una fiesta de merengue y recuerdos que cautivó a los asistentes y dejó claro que la esencia del “Caballo Mayor” sigue viva, resonando con fuerza en cada acorde y en cada corazón.
La producción del evento, que se convirtió en uno de los más esperados de la temporada, no solo rindió tributo a Ventura como cantante, sino que también ofreció una mirada profunda a su legado musical y personal. Jandy Ventura, acompañado por su orquesta El Legado del Caballo, dirigió la velada con una selección de éxitos que inmortalizaron a su padre, como La Agarradera, El Tabaco, Me Tiene Enredao, y Cabo e’ Vela, entre otros. El director musical Henry Jiménez, con su meticulosa curaduría, logró recrear la magia de los temas que definieron el estilo inconfundible de Johnny Ventura, transportando al público a esos momentos dorados de su carrera.
La noche, sin embargo, guardaba sorpresas para el público, y la más esperada fue la aparición del Gran Combo de Puerto Rico. La mítica agrupación se unió al homenaje con la interpretación de “Trampolín”, uno de los temas más emblemáticos de Ventura, con el cual dejaron claro que el legado de la música tropical trasciende fronteras y sigue vivo en cada escenario. La química entre los músicos de ambos países mostró la hermandad que siempre existió entre Puerto Rico y la República Dominicana a través de la música.
En una atmósfera cargada de emoción, Roberto del Castillo, amigo cercano de Johnny Ventura, compartió con el público anécdotas conmovedoras sobre sus viajes a Puerto Rico junto al artista. “Recuerdo cómo Johnny era recibido como un rey en Puerto Rico, siempre con una sonrisa y dispuesto a compartir su música con todos”, dijo Del Castillo, evocando los lazos de amistad y respeto que unieron al “Caballo Mayor” con la Isla del Encanto.
La gala también estuvo marcada por las presentaciones de otros grandes artistas, quienes aportaron su sello personal al tributo. Manny Cruz, el reconocido intérprete de música tropical, cautivó a los asistentes con su estilo único, mientras que Milly Quezada, La Reina del Merengue, interpretó un medley navideño que llenó de calidez la noche. Además, los grupos Manía, Limite 21, Oscarito y Melina León ofrecieron sus mejores éxitos, logrando que el público viviera una auténtica fiesta de merengue.
La escenografía también jugó un papel crucial en la magia de la noche. El productor artístico René Brea se encargó de crear un espectáculo visual de alto impacto, combinando luces, proyecciones y tecnología de inteligencia artificial para hacer que la imagen de Johnny Ventura cobrara vida en el escenario. A través de estas innovadoras proyecciones, los asistentes pudieron sentir la presencia del gran merenguero, como si estuviera allí, acompañando a su hijo y a los artistas en un homenaje a su inmortal legado.
La producción estuvo a cargo de Alexis Vázquez y Terrero Music, quienes se aseguraron de que cada detalle estuviera cuidado al máximo, logrando una experiencia inmersiva que dejó a los asistentes con la sensación de haber vivido una noche histórica.
Con la combinación perfecta de talento, tecnología y una explosión de recuerdos, el espectáculo “Johnny Vive” no solo celebró la vida del “Caballo Mayor”, sino que reafirmó que su legado musical sigue más vivo que nunca. Una noche que, como las canciones de Johnny Ventura, seguirá sonando en el corazón de los que tuvieron el privilegio de vivirla.