Una de las características de la fibra es que no resulta digerible, ni pasa por la sangre; sino que permanece en el intestino como parte de las heces .
La fibra es un componente de los alimentos vegetales que contiene polisacáridos (biomoléculas formadas por la unión de monosacáridos) y lignina (constituyente intercelular incrustante o cementante de las células fibrosas de los vegetales). No es un nutriente, pero sí altamente resistente a la hidrólisis (división de moléculas de ciertos compuestos orgánicos por acción del agua) en las enzimas digestivas humanas.
Las dietas abundantes en fibra, además del papel esencial que juegan en el proceso de defecación y para el funcionamiento de los intestinos, previenen enfermedades como la diverticulosis colónica, y ayudan a controlar la diabetes mellitus, el exceso de colesterol, la obesidad o el cáncer de colon.
Una de las características de la fibra es que no resulta digerible, ni pasa por la sangre; sino que permanece en el intestino como parte de las heces y al retener agua incrementa y acelera el proceso de deposición de éstas.
Consejos para aumentar la ingesta de fibra:
a) Consuma pan integral, pues éste contiene aproximadamente tres veces más fibra que el blanco.
b) Coma las frutas con su pulpa, en lugar de jugos,
pues la cantidad de fibra que contiene el zumo es mínima.
c) Aumente el consumo de legumbres y hortalizas.
d) Ingiera salvado y otros suplementos ricos en fibra.
Las hortalizas como las cebollas, espárragos, puerros y coles; así como las legumbres, contienen oligosacáridos, (tipo especial de fibra diferente a la celulosa que forma el salvado de los cereales) y que son metabolizados por las bacterias alojadas en los intestino y producen gases intestinales (inocuos, pero molestos).
Se ha demostrado que a pesar de los pequeños inconvenientes que provocan los gases, los oligosacáridos ejercen efectos beneficiosos para la salud, pues aumentan la población de bifidobacterias beneficiosas en la flora intestinal y evitan el estreñimiento porque aceleran los movimientos peristálticos del intestino.
Un desayuno que incluya cereales o pan integral, con unas ciruelas pasas (desecadas) y dos piezas de fruta fresca puede proporcionarnos los 25 gramos diarios de fibra que se recomienda ingerir (como mínimo) diariamente.
