El momento, cargado de simbolismo y orgullo latino, se volvió viral en redes sociales.
Un instante cargado de emoción, historia y reivindicación se vivió durante la presentación del nuevo álbum de Gloria Estefan, Raíces, cuando la artista dominicana Amara La Negra se reencontró con el legendario presentador Don Francisco, casi veinte años después de haber debutado en la televisión hispana a través del icónico programa “Sábado Gigante”.
Nacida como Diana Danelys De Los Santos, Amara formó parte del elenco infantil del programa desde los 4 hasta los 10 años, convirtiéndose en la única niña negra del elenco, un hecho que marcó un hito en la representación afro-latina en los medios de habla hispana. Fue precisamente en ese escenario donde, semana tras semana, la pequeña Amara conquistó al público con su carisma y desparpajo.
Un abrazo que cruzó generaciones
El reencuentro se produjo en el marco del lanzamiento del álbum Raíces, un tributo a la cultura y la música latina, que reunió a destacadas figuras del arte, la comunicación y la industria del entretenimiento. En ese contexto, Amara La Negra se acercó emocionada a Don Francisco y le expresó su gratitud:
“Gracias por ser parte de mis comienzos”, dijo mientras lo abrazaba con evidente emoción.
El veterano presentador la reconoció de inmediato, sellando el momento con un afectuoso intercambio que conmovió tanto al público presente como a miles de seguidores en redes sociales, donde el video del encuentro no tardó en viralizarse.

Más que nostalgia: afirmación de identidad
El gesto, más allá de lo nostálgico, fue percibido como un acto de validación, un reconocimiento a los orígenes y al valor de los espacios que permiten el surgimiento de nuevas voces. Para muchos, este reencuentro encarnó la trayectoria de una artista que, con constancia y autenticidad, ha logrado construir una carrera sólida y polifacética.
Desde aquellos días en Sábado Gigante, Amara La Negra ha evolucionado como cantante, actriz, empresaria y activista. Su participación en Love & Hip Hop: Miami, su contrato con BMG, y su actual rol como conductora en Desiguales por Univisión, la han consolidado como una figura clave del orgullo afro-latino en la cultura popular contemporánea.
Un legado compartido
El encuentro con Don Francisco fue también un guiño al legado del emblemático conductor chileno, quien durante décadas abrió una de las pocas plataformas masivas para artistas latinos emergentes. En palabras de muchos usuarios en redes, este momento no fue solo un recuerdo del pasado, sino también una celebración de lo que significa tener raíces, representación y oportunidades.
El abrazo entre Amara y Don Francisco, más que un reencuentro, fue un símbolo: el de una generación que floreció en cámaras y hoy, desde nuevos escenarios, sigue construyendo puentes de identidad y orgullo para la comunidad latina en todo el mundo.