La presidenta Jenisbel Acevedo lidera una acción transformadora en Samarita Primero con apoyo a estudiantes, familias y programas de formación técnica.
Verón, República Dominicana. – Lo que antes era una escuela con paredes descoloridas y pupitres gastados, hoy luce renovada, vibrante y llena de vida. Así lo vivieron decenas de niños y niñas del sector Samarita Primero, en Verón, gracias a una jornada solidaria liderada por la Fundación Acevedo, presidida por la escritora y filántropa Jenisbel Acevedo.
En víspera del nuevo año escolar, la comunidad fue testigo de una transformación que fue más allá de la pintura fresca. El evento, cargado de humanidad y esperanza, incluyó la entrega de útiles escolares, meriendas, juegos infantiles y, sobre todo, un mensaje claro: los sueños también se construyen en las aulas más humildes.
“Creemos en el poder transformador de la educación y en brindar herramientas reales a quienes desean superarse”, afirmó Jenisbel Acevedo, mientras recorría los pasillos recién pintados junto a voluntarios y vecinos. “Apoyar a niños, jóvenes y mujeres en su camino hacia un mejor futuro es parte esencial de nuestra misión”, agregó.

Uno de los momentos más significativos de la jornada fue la lectura del libro Un Barco de Sueños, escrito por la propia Acevedo. El relato, que cuenta la historia de una niña migrante y su travesía por mar junto a su familia en busca de un nuevo comienzo, tocó profundamente a los presentes. Muchos de los niños se vieron reflejados en la historia, en especial aquellos que han vivido en carne propia los retos de la movilidad humana y la desigualdad.
La escuela comunitaria beneficiada, más allá de su labor con la niñez, ofrece programas de formación técnica para jóvenes y adultos mayores de 16 años. Áreas como enfermería y farmacia forman parte de su oferta educativa, apuntando a generar oportunidades reales de desarrollo profesional en la zona.
“La escuela no es solo un espacio de aprendizaje académico. Es también un lugar donde se siembra dignidad, se cultiva autoestima y se proyecta futuro”, comentó uno de los profesores, visiblemente emocionado por la transformación del plantel.
Para la familia Acevedo, el compromiso con el bienestar de las comunidades más vulnerables no es nuevo. Desde su creación, la Fundación ha trabajado en iniciativas que combinan el acceso a la educación con el fortalecimiento del tejido social, especialmente en sectores de escasos recursos.
El evento en Verón es solo una muestra del impacto que puede generar una acción sostenida, organizada y con propósito. Una escuela renovada, mochilas llenas de útiles y una comunidad que se siente acompañada son los frutos inmediatos de esta jornada. Pero el verdadero cambio está en lo que viene después: niños con ganas de aprender, jóvenes con un nuevo horizonte y familias que ahora creen un poco más en el mañana.
Para conocer más sobre el trabajo de Jenisbel Acevedo y la Fundación Acevedo, puedes seguir sus redes sociales: @jenisbelacevedo | @acevedofoundation