San Miguel de Allende, México. – En la mágica ciudad patrimonio de la humanidad, Casa Hoyos, el hotel boutique que fusiona historia, arte y diseño contemporáneo, se prepara para celebrar el Día de Muertos con una experiencia tan íntima como inolvidable.
Fiel a su esencia de honrar las raíces y celebrar la vida, este año el hotel dedica su altar a Celia Hoyos Dobarganes, matriarca y alma inspiradora de la familia Hoyos. Una mujer visionaria, elegante y curiosa, cuyo legado sigue impregnando cada rincón de esta casa que ha convertido la hospitalidad en una forma de arte.

Por segundo año consecutivo, la diseñadora Karla Orozco interviene la ofrenda, concebida como una pieza viva donde lo espiritual y lo terrenal se entrelazan. Entre flores, maderas, frutos y minerales, los elementos naturales dialogan con el espacio para crear una atmósfera que celebra la vida, la memoria y la fuerza de las raíces femeninas.
En el corazón del patio central, las velas encendidas marcarán el inicio de un recorrido sensorial. El aroma de copal y flor de cempasúchil envolverá el ambiente, mientras la luz tenue y los tonos cálidos invitan a la contemplación y al recogimiento.
La noche será amenizada por el talento de Elix Chávez, cuya interpretación íntima y emotiva acompañará a los asistentes en un viaje sonoro de gratitud y conexión espiritual con quienes ya partieron. Como cierre simbólico, cada invitado ofrecerá una flor blanca, gesto de amor, memoria y respeto hacia los ancestros.
Con esta celebración, Casa Hoyos reafirma su compromiso con la cultura, el arte y la memoria, recordando que el verdadero lujo reside en los detalles que conectan pasado y presente, cuerpo y espíritu.
