Fue una imagen que dio la vuelta al mundo y conmovió a millones: un niño afgano de cinco años, con una camiseta de Lionel Messi hecha con una bolsa plástica celeste y blanca, como si se tratase del uniforme de la selección de Argentina.
Ahora, casi un año después, Murtaza Ahmadi finalmente conoció a su ídolo.
Murtaza pudo viajar a Catar, donde Messi estaba con sus compañeros del club Barcelona para jugar un amistoso el martes contra el club local al Ahli.
La reunión fue gestionada por el comité organizador de la Copa del Mundo de 2022 en Catar. En fotos distribuidas por los organizadores, aparece Murtaza dando la mano al futbolista argentino, quien luego lo levantó y posaron para fotos. Murtaza tiene puesta una camiseta del Barsa.
«Estoy muy contento por haber conocido a mi ídolo. Es un sueño», dijo Murtaza, en declaraciones difundidas por el comité organizador.
Murtaza entraría a la cancha con Messi.
El niño se convirtió en una sensación en las redes sociales este año cuando aparecieron fotos suyas jugando al fútbol cerca de su casa en la provincia de Ghazni. En las fotos, tiene puesta una bolsa plástica de rayas celestes y blancas, como las de la selección de Argentina, con la palabra «Messi» y el número «10» escritos con marcador negro en la parte trasera.
Unas semanas después, Messi le envió camisetas autografiadas del Barsa y de Argentina.
El padre de Murtaza, Mohammad Arif Ahmadi, dijo en mayo que la familia tuvo que irse de Afganistán tras recibir amenazas y el temor de que Murtaza fuese secuestrado debido a su fama.
«La vida se tornó miserable», dijo el padre en ese momento, en una entrevista telefónica con The Associated Press desde la ciudad pakistaní de Quetta, donde se asentaron.