Suiza necesitaba tan solo un triunfo para clasificarse nuevamente a la final de la Copa Hopman y Roger Federer saltó a la cancha con ese objetivo que no iba a dejar pasar.
Si bien fue un match que se definió en dos tiebreaks, Federer comandó las acciones en un choque muy apretado y de gran nivel ofensivo, donde los saques tuvieron mucho más peso que las devoluciones.
Belinda Bencic y Maria Sakkari completarán la grilla programada de la jornada y más tarde lo harán todos juntos en el doble mixto.
Así, Suiza luchará por revalidar el título que consiguió el año pasado. La de este año será la cuarta final helvética, campeona también en 2001 con Federer y Martina Hingis y finalista en 1992 con Jakob Hlasek y Manuela Maleeva-Fragniere. El rival de Suiza el sábado será el ganador del Australia-Alemania de este viernes.