Aquellos espacios en los que pasamos mucho tiempo, ya sea la oficina o el hogar, demandan parámetros estables de temperatura y humedad, capaces de velar por nuestra salud.
Así, por ejemplo, en un entorno adecuadamente climatizado notaremos que hay una disminución de los niveles de cansancio y fatiga, se reducen los dolores de cabeza y los resfriados. Y no solo eso, se ha demostrado que, si estás en un entorno limpio y con una temperatura adecuada, podrás reducir los niveles de estrés que pueden producirse debido a una deshidratación.
De hecho, el descanso por las noches es más profundo y relajado si la temperatura de tu habitación es la adecuada y el aire puede tener un impacto directo en la reducción de alergias y en la irritación de las mucosas y ojos.
“No importa la estación del año que sea, primavera, verano, otoño o invierno, una climatización adecuada es vital para nuestra salud y la de nuestra familia. Para lograrla, debemos estar conscientes, por ejemplo, de qué tipo de aire acondicionado estamos comprando, sus funciones y características, y de la importancia de darle mantenimiento.
Cuando los aires acondicionados no reciben un mantenimiento adecuado, la calidad de aire que empiezan a filtrar no es buena, las partículas que están suspendidas en el aire empiezan a ser de menor calidad y comenzamos a respirar polvo, bacterias y otros microorganismos”, asegura George Foundeur, de Daikin, una empresa líder en climatización.
Los filtros son unas mallas o filtros por los que hacemos pasar el volumen de aire de una habitación o vivienda varias veces por cada hora. En este filtro quedan retenidas las partículas de polvo, polen incluso ácaros suspendidos en el aire y que entran en nuestro hogar desde la calle.
Esta limpieza del aire resulta beneficiosa para todos, en especial para aquellas personas con afecciones alérgicas. Daikin, por ejemplo, incluye un filtro purificador de aire que elimina las partículas microscópicas suspendidas en el aire, neutraliza los malos olores y limita la reproducción de las bacterias, los virus y los microbios para garantizar un suministro constante de aire limpio.
Las últimas tecnologías en climatización cada vez incorporan filtros más avanzados que reducen la probabilidad de desarrollar alergias, asma u otras enfermedades respiratorias.
Un equipo de climatización inadecuado puede generar padecimientos como dolor de cabeza, cansancio, estrés, irritabilidad, resfriados e infecciones en las vías respiratorias debido a que no estamos respirando aire fresco. Por el contrario, tener aire fresco en nuestra habitación u oficina ayuda a tener nuestros pulmones más limpios y mejorar, incluso, nuestro ritmo cardíaco, concentración y humor.