La Iniciativa Regional de Eliminación de la Malaria (IREM) presentó ante los jefes de Estado y de Gobierno de Mesoamérica los primeros resultados de los esfuerzos conjuntos que se impulsan desde comienzos de 2019 para eliminar la malaria de estos países hacia finales de 2022.
La presentación se realizó durante la XVII Cumbre del Mecanismo de Diálogo y Concertación de Tuxtla que se celebra en San Pedro Sula (Honduras).
La IREM ha identificado 183 focos activos de malaria en los países de Centroamérica, Colombia, República Dominicana y México. Este primer hito va a permitir, a partir de ahora, planificar el trabajo de los equipos locales que detectarán y tratarán las nuevas infecciones en humanos con el objetivo de detener el ciclo de transmisión de la enfermedad.
Una de las principales novedades que aporta la IREM consiste en asegurar el diagnóstico con calidad en las primeras 48 horas a partir del inicio de los síntomas y el tratamiento farmacológico de los pacientes el mismo día del diagnóstico. De esta manera, se garantiza que el parásito se elimine en el ser humano, su único reservorio, evitando que un mosquito pueda diseminar la enfermedad a través de su picadura.
Los avances y objetivos de la IREM han sido presentados por Verónica Zavala, gerente del Departamento de Países de Centroamérica, México, República Dominicana y Haití del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). “Hemos construido, junto a varios socios estratégicos del sector público y privado, la Iniciativa Regional de Eliminación de la Malaria sobre la base de la experiencia adquirida con la Iniciativa Salud Mesoamérica, que ha permitido en los últimos 6 años acercar servicios de salud de calidad a más de 1,8 millones de mujeres y niños con la implementación de un modelo innovador de financiamiento basado en resultados.
Con la IREM, el objetivo es erradicar el peligro de contraer la malaria para los 18 millones de personas que viven en las zonas con focos activos de transmisión”, afirmó la representante del BID.
Verónica Zavala ha estado acompañada en esta presentación de Diana Measham, oficial de Programas de Malaria de la Fundación Bill&Melinda Gates; Annelise Hirschmann, gerente de América Latina y Caribe del Fondo Global, y Juan Manuel Sotelo, coordinador del Programa de Centroamérica de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
Anualmente, cerca de 80.000 personas enferman de malaria en la región mesoamericana y se estima que la población en riesgo de contraer este parásito sobrepasa los 50 millones de ciudadanos. Entre 2000 y 2015, los países de Mesoamérica redujeron sus casos de malaria en un 90%. Sin embargo, desde entonces los avances se estancaron, e incluso se produjeron repuntes en el número de casos detectados.
Por ese motivo, a comienzos de 2019 el BID facilitó una alianza público-privada que ya ha comprometido USD102,5 millones para financiar los trabajos de la IREM. Esta alianza está formada por el BID; los gobiernos de los países de Centroamérica, México, Colombia y República Dominicana; la Fundación Carlos Slim; la Fundación Bill&Melinda Gates; el Fondo Global para la lucha contra el SIDA, la Tuberculosis y la Malaria; la Organización Panamericana de la Salud; el Consejo de Ministros de Salud de Centroamérica (COMISCA); la Clinton Health Access Initiative (CHAI); y el Proyecto de Integración y Desarrollo de Mesoamérica.
Acerca del BID
El Banco Interamericano de Desarrollo tiene como misión mejorar vidas. Fundado en 1959, el BID es una de las principales fuentes de financiamiento a largo plazo para el desarrollo económico, social e institucional de América Latina y el Caribe. El BID también realiza proyectos de investigación de vanguardia y ofrece asesoría sobre políticas, asistencia técnica y capacitación a clientes públicos y privados en toda la región