Con el sentir de que es mejor dar que recibir, los ejecutivos de la empresa Mejía Arcalá, junto a la señora Olga Noboa de Arocha, Directora de la Red de Misericordia, ofrecieron un almuerzo navideño a con niños y jóvenes.
La actividad se convirtió en una tarde recreativa en la sede de la institución en la ciudad de Santiago, donde se ha venido desarrollando un trabajo sostenido en favor de la comunidad.
Con el apoyo de diversas entidades privadas y públicas han transformado la vida de cientos de niños en condiciones de vulnerabilidad, víctimas de abuso o abandono y que son acogidos desde su nacimiento hasta su inserción laboral a la mayoría de edad.
La iniciativa posee una cosmovisión de influir en el desarrollo de estos jóvenes, de manera que en el futuro puedan servir al país, dando de su tiempo y talento en las diversas áreas del conocimiento.
Raúl Rizik Yeb, presidente ejecutivo del Grupo Mejía Arcalá, afirmó que “en lugares como este, somos bendecidos de una manera especial, recordando que fruto de familias necesitadas de Dios, estos niños han llegado allí, sin embargo nos da el privilegio de compartir y recibir a la vez tantas sonrisas de gozo”.