Arranca la temporada de cine dominicano 2016 con la comedia “Mi suegra y yo”, una historia jocosa inspirada, de manera contraria, en una obra de teatro desarrollada por Roberto Salcedo (padre) en 1999.
En mayo del año pasado se comenzó este rodaje que involucra a la siempre carismática Charytín Goico, por quien los horarios de grabación se extendieron hasta altas horas de la madruga y, en algunos casos, se debió iluminar una noche como si fuese de día para lograr las escenas. Todo para sacar el mayor provecho a cada viaje de la artista al país.
La película cuenta la historia del amor entre Ernesto e Isabel, marcada por la presencia de la madre de esta, doña Laura. La famosa suegra que muchos detestan, esa suegra que resulta ser avasallante desde el primer momento, imponiendo su criterio en la relación de noviazgo de su hija, en la preparación de la boda y posterior a ella, con la llegada de todos (incluidos la sirvienta y el chofer) a vivir a la casa de Ernesto e Isabel. ¿Te suena familiar?
Y Bladimir Abud está apostando a su segundo largometraje. Se trata de A orillas del mar, donde vuelve a tratar un tema social en la pantalla grande. Hay que recordar que el joven cineasta presentó en el 2012 su ópera prima “La lucha de Ana”, en la que retrataba el drama de una madre -Cheddy García- que perdió su hijo.
El joven cineasta admite que volverá a reencontrarse con el género que lo dio a conocer en el séptimo arte: el drama.
“A orillas del mar” es la historia de un adolescente residente en una comunidad pesquera de Samaná que busca a su padre desaparecido. Esa búsqueda lo llevará hacer un viaje hacia Santo Domingo que le cambiará la vida.