El valor de las exportaciones de bienes de América Latina y el Caribe creció un 3,2% interanual en el primer semestre de 2024, tras una caída del 1,6% en 2023, según el reciente informe Monitor de Comercio e Integración 2024 del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Este repunte fue impulsado por el aumento de los volúmenes exportados y la estabilización de los precios. No obstante, la recuperación de las ventas externas aún enfrenta riesgos y no se consolida del todo, debido a un contexto global marcado por la fragmentación y volatilidad de los precios.
Las exportaciones intrarregionales de la región se contrajeron un 4,5%, mientras que las dirigidas al resto del mundo crecieron un 4,1%, lo que llevó a una disminución de la participación del comercio intrarregional al 13,7% del total. En contraste, los precios de las importaciones disminuyeron más que los de las exportaciones, mejorando los términos de intercambio de la región.
En el ámbito de los servicios, estos continuaron su expansión, aunque a un ritmo más moderado. En el primer trimestre de 2024, las exportaciones de servicios crecieron un 9,5%, una leve desaceleración respecto al 12,2% registrado en 2023, pero aún superior a la media global del 7,1%. Los servicios basados en conocimiento, como los empresariales y de informática, destacan por su resiliencia y dinamismo, representando una oportunidad para la región.
El economista Paolo Giordano, del BID, resaltó que “tras el rebote pospandemia, las exportaciones de bienes volvieron a un sendero de bajo crecimiento, mientras que los servicios muestran mayor resiliencia, especialmente los basados en conocimiento”. Sin embargo, la región enfrenta desafíos internos como la necesidad de mejorar el capital humano, la infraestructura digital y el acceso al financiamiento, así como barreras externas que limitan su competitividad global.
El informe concluye que, ante un entorno externo incierto, es clave fortalecer las políticas para potenciar las exportaciones de servicios, particularmente aquellos con alto valor agregado, y enfrentar la volatilidad de los mercados de bienes. El BID continúa trabajando en el desarrollo de soluciones para apoyar a la región en su crecimiento sostenible e inclusivo.