El melanoma es uno de los tipos de cáncer de piel más agresivos y mortales. A menudo se presenta como manchas o lunares oscuros en la piel expuesta al sol, como el rostro, los brazos y el pecho. Pero lo que muchas personas no saben es que el melanoma también puede aparecer en áreas no expuestas al sol, incluyendo las manos, los pies y debajo de las uñas.
El melanoma acral, como se conoce a esta variante, es especialmente peligroso porque a menudo se confunde con otras enfermedades de la piel, como los hematomas o las infecciones de uñas. Además, la mayoría de las personas no revisa regularmente sus manos y pies en busca de signos de cáncer, lo que puede retrasar el diagnóstico y el tratamiento.
El melanoma acral es más común en personas de piel oscura, como los afroamericanos, los asiáticos y los hispanos, aunque puede afectar a cualquier persona. Los síntomas incluyen manchas o líneas oscuras debajo de las uñas, así como cambios en la forma, el tamaño y el color de las uñas. También puede haber dolor, sangrado y engrosamiento de la piel alrededor de las uñas.
Es importante tener en cuenta que cualquier cambio en las uñas, incluyendo la aparición de manchas oscuras o cambios en la forma y el tamaño, debe ser revisado por un médico. El diagnóstico temprano es fundamental para el éxito del tratamiento del melanoma acral, que puede incluir cirugía, radioterapia y cirugía.
En conclusión, el melanoma acral es una amenaza silenciosa para la salud que puede afectar a cualquier persona, especialmente a aquellos con piel oscura. La prevención y la detección temprana son la clave para evitar su propagación y aumentar las posibilidades de supervivencia. No se demore en consultar a un médico si nota algún cambio en sus uñas o en su piel.