Este posible gemelo del Sol llamado HD 186302 está ubicado a aproximadamente 184 años luz de distancia y si no se trata de su gemelo, es casi seguro que se trate de al menos un hermano perdido de la enorme esfera de gas que nos alumbra.
La mayoría de las estrellas nacen en grupos que pueden llegar a miles en lo que conocemos como viveros estelares, unas masas enormes de nubes de gas y polvo, empujadas en grupos que gradualmente colapsan bajo su propio peso, formando las primeras etapas de las estrellas. Se cree que la vida del Sol comenzó de esta manera, hace ya 4.570 millones de años.
Las estrellas suelen acabar solas en la galaxia, pero la mayoría de ellas tiene al menos otra compañera.
Se estima que hasta el 85% de todas las estrellas podrían conformar pares binarios, o incluso sistemas triples o cuádruples; y más del 50% de todas las estrellas similares al Sol forman pares binarios.
Nuevas evidencia científica sugieren que el sol tuvo un gemelo binario en algún momento. Investigaciones recientes sugieren que la mayoría -si no todas- las estrellas nacen con un gemelo binario. Esta teoría nos lleva a suponer que la Tierra podría haber tenido dos soles.