Por Martin Hoz, Senior VP Regional de Ingeniería de Preventa en Fortinet para América Latina, Caribe y Canadá
En el panorama dinámico de ciberseguridad, la búsqueda de soluciones efectivas que no solo refuercen la postura de seguridad, sino que también minimizan la carga operativa y los costos, es constante. Exploraremos detenidamente tres tecnologías no intrusivas que prometen elevar las defensas de tu organización sin imponer una carga significativa en la infraestructura existente.
1. Protección contra riesgos digitales: Visualizando y resguardando la superficie de ataque externo
La creciente complejidad de la superficie de ataque externo requiere un enfoque proactivo y una visibilidad sin igual. La Protección contra Riesgos Digitales no solo proporciona una visión clara de la exposición de tu organización desde la perspectiva de un atacante, sino que también monitorea la posible suplantación de identidad y la venta ilícita de información corporativa.
La implementación es sorprendentemente sencilla: sin necesidad de configuraciones intrusivas, los informes comienzan a fluir rápidamente después de la configuración inicial. Este enfoque minimalista garantiza una mejora inmediata en la visibilidad del riesgo organizacional sin perturbar las operaciones diarias.
2. Tecnología de engaño (Deception): Atrapando los atacantes con señuelos virtuales
La tecnología de engaño es como un escudo invisible, atrayendo a los atacantes hacia entornos simulados y proporcionando información valiosa sobre sus tácticas y métodos. Mediante la replicación de servicios y datos ficticios, esta tecnología garantiza una tasa extremadamente baja de falsos positivos.
La implementación inicial implica replicar servicios ya existentes, sin tocar la infraestructura de producción. Los resultados son prácticamente instantáneos, proporcionando una capa adicional de defensa sin complicaciones operativas.
3. Monitoreo de experiencia digital: Optimizando la interacción del usuario y la disponibilidad de aplicaciones
En el mundo actual, donde la experiencia del usuario es clave, el Monitoreo de Experiencia Digital se erige como una herramienta esencial. Evalúa la facilidad de uso y la disponibilidad de aplicaciones, ofreciendo información crucial para prevenir limitaciones de recursos que podrían afectar la calidad del servicio.
Con una configuración inicial mínima, este monitoreo evoluciona gradualmente, proporcionando líneas de base para servicios clave. La capacidad de comprender la causa raíz de los problemas de rendimiento brinda una ventaja estratégica al optimizar la experiencia del usuario.
Integración simplificada para una defensa consolidada
Lo que hace que estas tecnologías destaquen aún más es la posibilidad de integrarlas en una única plataforma de seguridad. Al optar por un proveedor que ofrezca estas soluciones como parte de su cartera integral, se agiliza la implementación y se maximiza la inteligencia disponible para tomar decisiones informadas.
En resumen, estas tres tecnologías, a menudo pasadas por alto, no solo mejoran significativamente la postura de seguridad, sino que también ofrecen una implementación sin complicaciones. Al abrazar estas soluciones, las organizaciones pueden fortalecer sus defensas cibernéticas sin sacrificar la eficiencia ni abrumar sus infraestructuras existentes. La resiliencia cibernética nunca ha sido tan accesible y efectiva.