Santo Domingo. – Tras una tragedia, el impacto no solo se mide en términos físicos, sino también en las secuelas psicológicas que deja en los sobrevivientes y en los familiares de las víctimas. Así lo señala el psiquiatra y psicoterapeuta Héctor Guerrero Heredia, quien advierte sobre la importancia de ofrecer atención psicológica inmediata a los afectados para prevenir el desarrollo del trastorno de estrés postraumático (TEPT).
En declaraciones al portal Resumen de Salud, el especialista enfatizó que “lo más importante en una tragedia es la psicoterapia y muy poca medicación, en casos específicos, para evitar que los pacientes desarrollen el trastorno de estrés postraumático”. Según explicó, las personas que han experimentado eventos traumáticos pueden desarrollar síntomas como ansiedad, insomnio, recuerdos intrusivos y estados de ánimo depresivos, lo que afecta su calidad de vida a largo plazo.
Guerrero Heredia, quien cuenta con formación en psiquiatría de desastres en [TAL SITIO], destacó que el impacto psicológico no solo afecta a los sobrevivientes directos, sino también a los familiares de los fallecidos. A este fenómeno lo denominó “estrés postraumático de segunda intención”, subrayando la necesidad de brindar acompañamiento terapéutico a ambos grupos.
“El estrés postraumático es lo único que hay que vigilar y hay que trabajar en esos pacientes”, insistió el psiquiatra, ampliamente reconocido en la sociedad por su trayectoria en el ámbito de la salud mental.
El papel de la psicoterapia en la recuperación
Diversos estudios han demostrado que la intervención temprana en salud mental puede reducir significativamente los síntomas del TEPT. Estrategias como la terapia cognitivo-conductual, el apoyo grupal y la psicoeducación pueden ayudar a los afectados a procesar el trauma y recuperar su estabilidad emocional.
Expertos en salud mental coinciden en que, tras una tragedia, es fundamental que las autoridades sanitarias implementen programas de apoyo psicológico para garantizar la recuperación integral de los afectados. La iniciativa no solo contribuiría al bienestar de los sobrevivientes y sus familias, sino que también podría prevenir complicaciones emocionales y psiquiátricas a largo plazo.
En un contexto donde los desastres naturales, accidentes y situaciones de violencia pueden generar crisis emocionales profundas, la recomendación del Dr. Guerrero Heredia cobra especial relevancia: atender la salud mental debe ser una prioridad en cualquier estrategia de respuesta ante emergencias.