En respuesta al preocupante aumento de la violencia de género en Haití, la Policía Nacional ha intensificado su formación en este ámbito, con el respaldo de la Oficina Integrada de Naciones Unidas en Haití (BINUH). Del 11 al 13 de septiembre, 41 agentes, entre ellos 29 mujeres y 12 hombres, recibieron capacitación en Puerto Príncipe para enfrentar la violencia basada en el género, en un esfuerzo por mejorar el acceso a servicios policiales para las víctimas de esta grave problemática.
Esta formación es parte de un proyecto de dos años financiado por Canadá y coordinado por la BINUH y la Oficina de Derechos Humanos de la ONU, cuyo objetivo es fortalecer la capacidad de las fuerzas del orden para asistir a las supervivientes de violencia sexual. El impacto de esta iniciativa se ampliará en los próximos meses, con planes de replicar la capacitación en las regiones norte y sur del país, donde la situación es aún más crítica.
Según el Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA), el 94% de las mujeres y niñas en estas áreas está en riesgo de sufrir violencia de género.
Ante esta alarmante realidad, la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) ha urgido la necesidad de una respuesta coordinada para proteger a las mujeres y niñas, describiendo el contexto actual como una crisis que requiere «acción urgente».
Las cifras son escalofriantes. Naciones Unidas reporta que el 72% de los casos de violencia de género en Haití están relacionados con violencia sexual. Además, las mujeres y niñas representan la mitad de los desplazados internos, lo que las hace especialmente vulnerables a ataques, secuestros y violaciones en medio de la creciente inseguridad que afecta al país. En 2023, la violencia se cobró más de 8,000 víctimas entre muertos y heridos, y para la primera mitad de 2024, ya se registraron cerca de 3,900 víctimas.
Haití enfrenta una situación de extrema violencia, con bandas criminales controlando aproximadamente el 80% de la capital, Puerto Príncipe, y otras zonas. En un intento por contener esta crisis, en junio de 2024 se desplegó una Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad, liderada por Kenia y aprobada por la ONU, con el objetivo de restablecer el orden y proteger a los sectores más vulnerables de la población.
La formación de la Policía haitiana es un paso importante, pero los retos para garantizar la seguridad de las mujeres y niñas en un país sumido en el caos siguen siendo inmensos. Las agencias internacionales continúan llamando a reforzar las acciones y la cooperación para mitigar esta trágica realidad.