La producción que se estrena este miércoles, se presentará los días 10, 12 y 14 de abril en la Sala Principal del Teatro Nacional
Algunos de sus intérpretes y productores nacionales externan sus emociones próximo al estreno, y nos cuentan lo que podremos apreciar de este exquisito montaje, que recreará el Santo Domingo de los años 50.
“El segundo acto, la parte de la fiesta, es la que más me emociona. El alma de la obra se concentra en esta parte, asegura Pura Tyson”.
Lo vocal siempre ha sido un reto para la presentación de esta obra maravillosa. La preparación técnica es lo más exigente, el movimiento escénico es un complemento, pero lo vocal siempre representa el mayor peso.
Conocer el personaje, y manifestar esto en el movimiento escénico y expresión, es más que un reto.”
De su lado, Paola González dice lo siguiente: “Me emociona que es una producción dominicana, la ambientación de los 50, el vestuario original. El hecho de poder trabajar con grandes cantantes internacionales y nuestros, trabajar con el maestro Molina, y además de actuar, ser la directora vocal de los solistas locales, es un honor.
Mi reto es que todo el que este en stage de lo mejor de sí, y el mío personal es impulsar el rol de violeta interpretado por Nathalie, un personaje que evoluciona y traspasa las emociones de la voz al cuerpo y a lo que el público podrá sentir.”
Otra de las figuras de la pieza es Otilio Castro, quien habla de su personaje en la producción: “Gastón mi personaje, es el alma de la fiesta, es quien introduce a Alfredo con Violeta, es el amigo de ambos, y es una responsabilidad escénica para mí. Tener estos grandes maestros para esta producción es más que emocionante.
Mi mayor reto es tratar de transmitirle al público esta emoción, la de mi personaje, que logren identificarse con él y vivir esta historia a través de él.”
Leonel Lirio se refiere al reto que asume al revivir el vestuario de los años 50.
“Los detalles más importantes que componen una gran producción como esta, que ha sido presentada en los más importantes teatros del mundo, es el enfoque artístico, como esta idea que tuvo Fidel López y Eduardo Villanueva, de enfocarlo en una época tan majestuosa como fueron los años 50. Es una época donde hubo un florecimiento de la moda, que incluso en la dictadura fue promovido de forma efusiva.
Como creador representa un gran reto revivir esta época, dice el destacado modisto dominicano. “Es la primera vez que una ópera está bajo mi dirección en vestuario, aunque he trabajado de forma particular, con artistas en montajes como la Boheme, pero esta es mi experiencia más importante. Me sumo como un privilegio a este grupo de artistas como son Fidel López, Villanueva, Molina y Carlos Veitía.”
De su lado, Fidel López habla sobre la esencia de la obra: “Esta puesta en escena está ambientada en los 50´s, pero la esencia se mantiene, esta obra de Verdi inspirada en la obra de Dumas, es una historia de amor, por eso escogimos esta época, visualmente tan romántica.
Una producción como esta requiere mucho ensayo, 6 meses de ensayo, y el ballet dirigido por Carlos Veitía es un ensayo de dos meses.
La ópera es grandiosa, reúne canto, danza, música, visuales, y queremos que esta puesta la gente sienta que está viendo un espectáculo a nivel internacional.
Jose Antonio Molina, para mi es una felicidad trabajar con él. Hace mucho quedamos en llevar este tipo de propuestas cada dos años, pero no lo hicimos… ahora retomamos y pretendemos llevar esto a cabo.”
Finalmente, Eduardo Villanueva refiere sus experiencias en las tablas y su nuevo reto con esta romántica historia de amor.
“He tenido la suerte de haber visto todas las producciones de ´La Traviata´ que se han presentado en República Dominicana. La primera fue por La Voz Dominicana en la década de 1950, con Violeta Stephen y Rafael Sánchez Cestero. En 1973 participé como solista y bailarín en ´La Traviata´ presentada durante el Festival de Inauguración del Teatro Nacional, bajo la dirección musical de Carlos Piantini y la dirección escénica de Arístides Incháustegui.
Posteriormente, el maestro Piantini realizó dos producciones más, bajo la dirección escénica de Anthony Stivanello y Franco Gentilesca, respectivamente. Ahora José Antonio Molina y Fidel López me han encomendado esta nueva producción, la cual, respetando el hilo conductor del argumento original, ofrecerá un contexto dramático que sorprenderá al público, a sabiendas de que ´La Traviata´ es una historia de amor que ha deleitado a varias generaciones desde su estreno en 1853”.