Tras una espera de 10 años el quinteto rompió el maleficio y con una auténtica masacre derrumbaron las esperanzas del Miami Heat este domingo por marcador 106-93. LeBron James consiguió su cuarto anillo.
En lo que fue su exhibición número 260 en la postemporada, el Rey se encargó de orquestar un duelo casi perfecto para su equipo. El quinteto no desentonó en ninguna de las líneas y desde el primer momento apagó el calor de sus rivales.
El Heat sorprendió tras activar a Dragic, sin embargo su estrella se notó con falta de ritmo y todo el equipo no tuvo la chispa necesaria para maniatar a la dupla letal de los angelinos. Por si fuera poco, la banca del grupo de Staples Center se comportó a la altura y con una soberbia participación de Rondo, se ayudó a edificar el camino hacia el título.
LeBron y su triple doble se convirtieron en un desahogo, el Rey finalizó con 20 puntos, 10 asistencias y 14 rebotes. Mientras que del lado de Miami, la llama de Jimmy Butler acabó por extinguirse pese al empuje que representó.
La aplanadora de los angelinos fue tal que durante un momento, la diferencia fue de 36 puntos. El último cuarto prácticamente fue un trámite para ambos equipos. Al final, los Lakers rompieron una sequía de la mano de Davis y James.
Tras la obtencion de este campeonato, los Lakers igualaron con 17 a los Celtics y en una temporada atípica, Los Angeles se pintaron de amarillo y morado. Mientras que Kobe Bryant tuvo el homenaje perfecto.
El equipo de Los Ángeles, con 17 coronas, igualó con los Celtics de Boston con más títulos ganados en la historia de la NBA. LeBrom, en cambio, obtuvo su cuartó premio de Jugador Más Valioso de finales.