Los órganos sexuales de la mujer suelen ser una de las partes más importantes de organismo, y los que más cuidados higiénicos exigen para preservar la salud. Y no se trata de lavarlos con frecuencia sino de manera adecuada.
Por ser una cavidad interior y húmeda, la vagina puede convertirse en motivo de obsesión para algunas mujeres que en lugar de cuidados, más bien la perjudican con tanto aseo errático.
Según a doctora Bienvenida Hernández, el aseo femenino debe ser diario y externo. Y nada de duchas vaginales a no ser que sean expresamente indicadas por el médico.
Según la especialista, este órgano es capaz de expulsar, con sus propias secreciones, la suciedad que en ella pueda haber. Irrigarla con infusiones o jabones sólo puede desnivelar el delicado PH vaginal, dando pie a la reproducción agresiva de levaduras causantes de hongos y otras infecciones importantes.
Es por ello que se hace necesario sentir y mantener limpia y fresca el área genital, para lo cual, basta una ducha con jabón neutro o suave, con eso se alejarán los olores ofensivos y las comezones producidas por el sudor y el vello púbico.
El resto del día basta secarse los restos de orine con papel higiénico. En caso de abundante flujo, lo que puede ser un síntoma de alguna infección, usa protectores diarios y realice una visita a su ginecólogo.
Períodos menstruales
Cuando estamos con la menstruación es aconsejable cambiar frecuentemente de toallita sanitaria y si usamos tampón, este no debe estar más de cuatro horas en nuestra vagina pues podría favorecer la reproducción de microorganismos que afectan el balance natural del canal vaginal.
En caso de secreciones o flujos excesivos o fétidos, es recomendable acudir sin demoras a un especialista pues puede tratarse de una infección que comprometer seriamente la salud de nuestros órganos reproductivos.