El banquillo de los Atlanta Hawks ha durado poco tiempo sin un entrenador en jefe. Según ha informado Adrian Wojnarowski de ESPN, y fuera confirmado después por el propio equipo, Nate McMillan, actual asistente de los Hawks, ha aceptado el puesto de head coach interino que quedara vacante tras la destitución de hace unas horas de Lloyd Pierce. De esta manera, McMillan volverá a dirigir un equipo NBA después de dejar los Indiana Pacers en la última temporada baja.
Según el reporte, McMillan no se sentía cómodo con aceptar el puesto que dejó Pierce, pero fue el propio ahora ex entrenador de Atlanta quien intercedió para que su asistente no dejara pasar la oportunidad. Por lo que ahora deberá tomar a unos Hawks que poseen un récord de 14-20; y que no están cumpliendo las expectativas depositadas en ellos tras varios movimientos en la agencia libre.
Justamente McMillan había sido contratado como asistente principal de Pierce para esta temporada, con mucha gente especulando que la razón era exactamente la que acaba de cumplirse. Tener un reemplazante directo y con experiencia más que comprobada por si el equipo decidía dejar ir a Pierce.
El despido de hoy significa el segundo de un entrenador durante lo que llevamos de temporada, uniéndose a la reciente salida de Ryan Saunders de los Minnesota Timberwolves. Aunque en el caso de Atlanta, McMillan mantendrá el trabajo hasta el final de la temporada, y recién entonces tomarán una decisión a largo plazo.
McMillan ha dirigido 1.249 partidos como entrenador en jefe de la NBA. Cosecha un 52,9 por ciento de victorias, y destaca por tener una excelente reputación no solo de sus jugadores, si no de todos alrededor de la Liga. Su último trabajo como head coach fue durante cuatro temporadas en los Indiana Pacers, clasificando a playoffs en cada una de ellas, con un récord total de 183-136.
Además McMillan ocupa el puesto número 22 en el listado histórico de entrenadores con más victorias de la NBA. En total, en sus 16 temporadas dirigiendo algún equipo, acumula un récord de 667-591 con pasos por Seattle, Portland e Indiana. Su tinte defensivo debería ser de gran ayuda para unos Hawks que han lidiado con problemas en ese costado de la cancha durante los últimos años.