Los Ángeles, EE.UU. La actriz Naya Rivera quería relanzar su carrera en el mundo de la música antes de su trágica muerte en un lago al norte de Los Ángeles el pasado verano.
La artista, de origen puertorriqueño y popular por aparecer en la serie de televisión «Glee», tenía planeado un viaje a Nashville (EE.UU.) para grabar varias canciones que llevaba escribiendo desde hacía un tiempo, contó su padre, George Rivera, en una entrevista con la revista People.
«Estaba deseando realmente empezar a grabar música otra vez. Nuestra relación se basaba en la música», aseguró.
Rivera falleció el pasado mes de julio en un lago ubicado en Ventura (California, EE.UU.), a unos pocos kilómetros del condado de Los Ángeles. Tras una búsqueda de seis días, las autoridades identificaron su cuerpo en el agua.
La actriz, de 33 años, había alquilado en ese mismo lugar un bote de recreo con su hijo de cuatro años a primera hora de la tarde, pero cuando ninguno de los dos regresó, un segundo barco localizó al menor solo y dormido sobre la embarcación con un chaleco salvavidas.
«Adoraba ser madre, y se notaba la satisfacción que Josey (su hijo) trajo. Eran buenos tiempos para ella», recordó el padre.
Según las investigaciones no hubo indicios de «un acto criminal o suicidio», por lo que la hipótesis principal continúa siendo un desafortunado accidente.
De acuerdo con George, la artista había escrito varias canciones e iba a asociarse con una banda para relanzar su carrera, después de su experiencia en la serie musical «Glee», que se convirtió en un fenómeno internacional durante su emisión entre 2009 y 2015.
Los creadores del formato, lamentaron la trágica muerte de su compañera.
«Naya no era del reparto regular cuando la elegimos en ‘Glee’. No tenía más que unas pocas líneas en el primer episodio. Pero no nos llevó más de uno o dos para darnos cuenta de que habíamos encontrado a una de las estrellas más especiales y más talentosas con las que alguna vez tendríamos el placer de trabajar», afirmaron Ryan Murphy, Ian Brennan y Brad Falchuk.
EFE