SANTO DOMINGO, D.N. La República Dominicana posee “un enorme potencial” para convertirse en líder del turismo náutico, para lo cual resulta necesario superar algunos desafíos que dificultan el desarrollo de este segmento turístico que generará significativos ingresos a la economía nacional.
El planteamiento lo hizo Patricia Guzmán Parra, Directora del Departamento de Medio Ambiente de la firma DMK Abogados – Central Law, en el marco del Foro Dominicano Anual de Turismo 2015, (FODATUR), en el cual destacó los desafíos jurídico-institucionales a vencer para fines de potencializar el turismo náutico de una manera sostenible.
“Hasta el día de hoy hemos entendido que el orden público nacional se circunscribe a los límites terrestres, dándole la espalda al universo de oportunidades que representa el mar para esta media isla”, expuso.
Guzmán expresó que el marco regulatorio del turismo náutico es “casi nulo”, que existen iniciativas en ese sentido que tienen años “cocinándose sin éxito” en el Congreso Nacional, y que las normativas vigentes se encuentran dispersas y en ocasiones resultan ambiguas, lo que resulta en un desafío de cara a la potencialización del sector.
“Considero necesaria una normativa eficaz y acorde con las nuevas necesidades del sector”, que rija todo lo concerniente al mismo y que establezca con claridad los requisitos de navegación, abanderamiento, permisos de navegación, registro marítimo, salvamento y seguridad de la navegación, entre otros.
De acuerdo con Patricia Guzmán, el otorgamiento de licencias, certificados y expedición de permisos para entrada, circulación y salida de embarcaciones turísticas de recreo y deportivas, constituye un desafío para facilitar la navegación en aguas territoriales dominicanas.
Tas señalar que el turismo náutico ha sido tradicionalmente percibido como una actividad de “lujo y exclusiva para una pequeña elite”, Guzmán entiende que resulta oportuno crear los mecanismos necesarios para facilitar los trámites relativos al otorgamiento de autorizaciones de navegación en el país.
“El turismo náutico depende íntegramente de la conservación de los recursos costeros y marinos, lo que será posible solo mediante la adecuada integración de los sectores público y privado”, manifestó Patricia Guzmán. Indica que el Estado tiene el desafío de mantener una posición activa, y de intervención bajo el principio de prevención, es decir, actuar anticipadamente, antes de la ocurrencia cualquier hecho que vaya en detrimento del medio ambiente, mediante mecanismos de educación, control y fiscalización.
El gran reto del país –asegura- es el desarrollo de puertos deportivos y marinas a lo largo de nuestras costas, en las cuales las embarcaciones de recreo puedan “fondear” con facilidad, y así hacer posible el crecimiento del turismo náutico.
“El desarrollo del turismo náutico podrá ser posible mediante la creación de más puertos deportivos, que no deben ser lujosos, solo deben poseer las características necesarias para ofrecer servicios de calidad a quienes posean botes, yates o embarcaciones pequeñas, y deseen atracar en nuestras costas para cualquier fin.”
A su juicio, el turismo es el principal “pilar” de la economía nacional, razón por la cual el Estado tiene el compromiso de promocionar y ofertar los distintos atractivos del país en esa materia, dentro de los cuales resulta prudente incluir las actividades asociadas al turismo náutico.
La experta indica que tradicionalmente se ha promocionado el turismo de crucero dentro de este segmento, sin embargo, es necesario promover otros productos que forman parte del turismo náutico tales como submarinismo, buceo, remos, motos acuáticas, pesca deportiva, y otros, para lograr una verdadera oferta turística ampliada.
Guzmán considera necesario apostar al turismo náutico, porque –entiende- es una pieza fundamental de la locomotora de la economía nacional del país que es el turismo, razón por la cual hay que crear las condiciones para su desarrollo “bajo estrictos estándares de sostenibilidad”.