Los piojos son pequeños insectos que se mudan en las cabezas de las personas y se alimentan de la sangre humana.
Los piojos adultos pueden llegar a medir entre dos y tres milímetros de largo y ponen sus huevos en el cuero cabelludo. No obstante, también pueden aparecer piojos en otras zonas del cuerpo, como en el vello púbico, las pestañas y las cejas.
Una buena forma de combatir a estos fastidiosos bichos es utilizando remedios caseros, fáciles de adquirir y sobre todo a muy bajo costo.
Hay varios aceites esenciales que son efectivos para el tratamiento de piojos.
Los aceites de lavanda, clavo, eucalipto, anís, canela, tomillo rojo, menta, coco, árbol del té y nuez moscada son los más recomendados en estos casos.
Uno de los más efectivos es de aceite de sésamo, conocido como aceite de ajonjolí.
Una de las propiedades del sésamo para tu pelo, y de las más desconocidas, es que es capaz de tratar la infestación por piojos.
Puede mezclar el aceite tibio con pimienta, menta, tomillo, canela, clavo u otra especia de su preferencia para intensificar su poder.
La mezcla se aplica sobre el cuero cabelludo con algodón y se deja que actúe toda la noche o al menos unas 12 horas. Por la mañana, lavar el pelo con champú, se enjuaga y se repite el mismo proceso esa noche.
Otra posibilidad es mezclar las 15-20 gotas de aceite esencial con alcohol o esencia de canela y frotar sobre el cuero cabelludo. La mezcla también se deja que actúe sobre el pelo unas 12 horas y se lava al día siguiente.