La Delegación Permanente de la República Dominicana ante la Organización de las Naciones Unidas para la Educación la Ciencia y la Cultura (UNESCO), asumió hoy, la coordinación del Grupo de Trabajo del sector de Ciencias Sociales y Humanas de la UNESCO en representación del Grupo de Países de América Latina y el Caribe (GRULAC).
El sector, una de las áreas más innovadoras de esa agencia especializada de las Naciones Unidas, busca apoyar la transformación social, contribuyendo al desarrollo de sociedades inclusivas en América Latina y el Caribe.
Otro de los objetivos es impulsar el diálogo intercultural, fortalecer y promover la bioética y los principios éticos relacionados a la ciencia y la aplicación de las tecnologías emergentes, bajo un enfoque de derechos humanos y de equidad de género.
La delegación trabaja con los gobiernos y las organizaciones comunitarias para lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible a nivel mundial, específicamente, en la búsqueda de la inclusión social, la erradicación de la pobreza extrema, la reducción de las desigualdades y la consolidación de sociedades más justas y pacíficas, concientizando sobre valores éticos y la plena vigencia de los derechos y las libertades fundamentales.
Según dio a conocer el delegado permanente de la República Dominicana, José Antonio Rodríguez, “como coordinadores del Grupo de Trabajo de este sector, mantendremos una responsabilidad y un contacto más cercano junto a los técnicos de la UNESCO, a los fines de poder robustecer los proyectos de cara al 2020, con los países de la región”.
El embajador dominicano dijo que hay iniciativas que desde ya fortalecen nuestra posición a la cabeza de este Grupo, como, por ejemplo, la presidencia de la Mesa Directiva de la Convención Internacional contra el Dopaje en el Deporte, y el Premio UNESCO/Juan Bosch para la Promoción de la Investigación en Ciencias Sociales & Humanas en América Latina y el Caribe.
Rodríguez reiteró que próximamente trabajará con el tema de la inclusión, a través de una comisión del Despacho de la Primera Dama, Cándida Montilla de Medina.
A juicio de Rodríguez, el despacho de la Primera Dama realizan una labor que podría servir de modelo no solo en América Latina y el Caribe, sino alrededor del mundo.