A pesar de que el Ministerio de Salud Pública emitió el pasado año la resolución número 000003-2017, que regula el uso de la hookah o pipa de agua, en algunos lugares continúa esta práctica, que pone en peligro la salud, tanto del consumidor, como del que respira los contaminantes del humo en espacios cerrados.
La oncóloga Jazmín García abogó por que en el país se establezcan controles más estrictos, dirigidos a prohibir el uso de hookahs en lugares cerrados, entre ellos las discotecas y drinks, para evitar la exposición a humo y sustancias tóxicas, como medida dirigida a reducir el riesgo de cáncer de pulmón, cabeza y cuello uterino, colon, entre otros.
En una entrevista publicada en Listín Diario, la especialista explica que tanto el tabaco como las sustancias tóxicas que se introducen en la hookah son responsables de una alta incidencia de cáncer de pulmón, garganta, laringe y lengua, así como de otras enfermedades debido al contacto, porque la pipa es compartida por muchos usuarios al mismo tiempo.
La experta recordó que el tabaco es un problema mundial, responsable del 22% de las muertes por cáncer y del 78% de cáncer del pulmón, por lo que cuando se habla de prevención de cáncer la principal medida a tomar es dejar de fumar.
“La hookah es tóxica, porque aquí se están consumiendo sustancias nocivas, ya que el tema es lo que se le hecha, estas vaporizando esas sustancias y esos químicos van a dañar el tracto respiratorio”, dijo la especialista a la periodista Doris Pantaleón.
Al referirse a los tipos de cáncer de mayor incidencia en el país, la especialista considera que predominan el cáncer es de mamas y cérvix en la mujer, mientras que en el hombre los de colon y próstata siguen siendo los que se diagnostican con más frecuencia en República Dominicana, mientras que el cáncer de pulmón es el más frecuente en el mundo.
Historia de su uso
Esta forma de consumir las hojas del tabaco se originó en la conjunción de India con Occidente. Entre el desierto del Thar y Ran de Kutch se extiende el estado de Gujarat, donde la tradición sitúa las primeras hookahs.
Los instrumentos más antiguos que permitían el lavado del humo se componían de dos cañas incrustadas en una nuez de coco. No sabemos qué fumaban antes de que los europeos introdujeran en tabaco americano en Asia, pero sin lugar a dudas, las menciones a la cachimba ya aparecen en diversos documentos escritos anteriores.
En el año 1600 la hoja de tabaco se mezclaba con molasas a la par que la rudimentaria hookah se estilizaba para adaptarse a sus nuevos consumidores: las monarquías mogol, persa y turca.
Los bellos narguiles de cristal tallado y metal son herederas de la tradición palaciega, común entre hombres y mujeres de la corte, pero solo hace 50 años que se puede disfrutar de los tabacos saborizados inventados en Egipto en pleno siglo XX.
