Oviedo, R.D. — Ante el aumento de falsificaciones y con el objetivo de proteger el legado artístico del pintor dominicano Ramón Oviedo, cuya obra supera las 15 mil piezas, la Fundación Ramón Oviedo exhortó a los propietarios de cuadros, dibujos, grabados y esculturas del maestro a acercarse a la institución para autenticarlas y garantizar su valor artístico y económico.
El presidente de la fundación, Omar Molina Oviedo, recomendó que los interesados verifiquen la procedencia de las obras, así como su divulgación en medios de comunicación, catálogos, monografías o exhibiciones. Asimismo, indicó que la certificación de autenticidad debe solicitarse directamente a la fundación a través del correo institucional: fundacionramonoviedo@hotmail.com.
“En los últimos años, hemos notado un incremento exponencial en los precios de las obras de Ramón Oviedo, debido a la valoración y el respeto que le profesan instituciones, coleccionistas y público. Sus creaciones garantizan una inversión segura, que por la genialidad del artista, se incrementa con el tiempo”, explicó Molina Oviedo.
La fundación, única institución legalmente autorizada para autenticar las obras del maestro, representa la imagen del artista y gestiona todos los aspectos financieros de su legado. Desde 2014, la organización está a cargo de los hijos de Oviedo —Aracelis, Ramón, Rafael y Raúl Oviedo Colón—, junto con su nieto Omar Molina Oviedo, actual presidente.
El titular de la fundación reafirmó su compromiso de proteger las creaciones del reconocido artista en escenarios jurídicos y sociales, evitando que terceros se aprovechen de su legado. Destacó que las obras de Oviedo forman parte de importantes museos y colecciones internacionales, incluyendo la Organización de Estados Americanos (OEA), la UNESCO y la Galería Degli Uffizi, en Italia.
“Las creaciones de Oviedo son un referente de la contemporaneidad que mantendrá su vigencia en la preferencia artística de las presentes y futuras generaciones, porque constituyen una interpretación profunda de la condición humana”, concluyó Molina Oviedo.