Santo Domingo, diciembre de 2025.- El crimen no duerme; simplemente encuentra una almohada cada vez más cómoda. Y el mercado de los medicamentos falsificados es prueba de ello. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que entre el 10 % y el 30 % de los medicamentos que circulan en países en desarrollo —como República Dominicana— pueden ser falsificados. Dicho de otra manera: hasta 3 de cada 10 fármacos podrían no ser auténticos.
Esto golpea tanto a los pacientes como a los sistemas de salud.
Impacto en la salud de los pacientes
Los medicamentos falsificados carecen de efecto terapéutico y, peor aún, pueden contener sustancias tóxicas. Esto provoca riesgos graves, prolongación del sufrimiento, fallas terapéuticas, complicaciones y aumento de la resistencia antimicrobiana.
Golpe económico
En lo económico, la herida es igual de profunda. Los sistemas de salud pueden gastar hasta 30 mil 500 millones de dólares a nivel global por esta problemática. Las pérdidas se multiplican entre tratamientos ineficaces, mayor carga asistencial, hospitalizaciones y pérdida de productividad.
Fármacos más afectados
Según estudios recientes, los productos más falsificados suelen ser los de alta demanda:
antibióticos, tratamientos contra la malaria, vacunas, medicamentos para adelgazar y productos para resfriados, especialmente en época navideña e invernal.
Alerta regional en Navidad
Ante el aumento de consumo en diciembre, la Federación Centroamericana y del Caribe de Laboratorios Farmacéuticos (FEDEFARMA) alertó que durante las fiestas se incrementa la circulación de medicamentos falsificados, especialmente los destinados a tratar resfriados.
Recomendaciones para pacientes
• Comprar siempre en farmacias formales y puntos autorizados.
• Desconfiar de precios demasiado bajos.
• No adquirir medicamentos en ventas ambulantes ni sitios sospechosos en Internet.
• No creer en publicidad milagrosa.
• Revisar empaques, sellos de seguridad y fecha de vencimiento.
• Desechar medicamentos vencidos en puntos autorizados.
• Reportar cualquier venta sospechosa a las autoridades.
La advertencia está hecha. Y como dice el refrán: el que cae, es porque no se fijó.
