Aunque el huevo siempre ha sido un alimento muy popular, hasta hace algún tiempo se recomendaba restringir su consumo porque se consideraba que constituía un factor de riesgo para la aparición de enfermedades cardiovasculares. Pero ese es un mito que ha sido derribado.
Sobre el particular, la licenciada Mónica Bamonde Vidal, nutricionista y coordinadora del Instituto Latinoamericano del Huevo, en un trabajo publicado en la revista cubana Alimentación y Nutrición, en septiembre del 2009, plantea ciertas informaciones que quiero compartir con ustedes.
En el citado artículo, la especialista en nutrición define al huevo como un excelente e inigualable alimento, con un rol determinante en la dieta habitual, pues nos permite llevar una alimentación balanceada, variada y nutritiva, según lo certificó en el 2002 el Consejo Americano de Ciencia y Salud.
Explica, además, que aunque en la década de los 70´s se consideró que el colesterol elevado en sangre era un factor determinante en la adquisición de enfermedades cardiovasculares, ya está comprobado que el huevo no las provoca, porque la mayoría de la grasa que contiene es insaturada.
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Sostiene que el huevo es un alimento económico y altamente nutritivo, ya que contiene casi todos los nutrientes (excepto de vitamina C). Es una de las pocas fuentes de vitamina D (necesaria para la correcta fijación del calcio en los huesos), además de su fácil digestión y que ayuda a los enfermos en proceso de convalecencia.
Un huevo de tamaño promedio, con un peso de 60 gramos, aporta unas 70 kilocalorías, brinda una sensación de saciedad y es fácil de consumir, por lo que resulta ideal en los regímenes alimenticios orientados a la pérdida de peso.
Otros beneficios que nos ofrece son los siguientes:
– Contiene luteína y zeaxantina, pigmentos que encontramos en la yema y se han relacionado con la prevención y la mejora de enfermedades maculares degenerativas (importante causa de la pérdida de la visión en los adultos mayores), y algunos tipos de cánceres.
– Es una fuente de lecitina, que actúa como emulsificante de las grasas alimentarias y participa en la digestión de las mismas.
– Aporta ciertas proteínas resultan antimicrobianas y también antioxidantes.
Por todo lo anteriormente expuesto, que se sustenta en investigaciones científicas actuales y por ser un alimento económico, apetitoso y nutricionalmente completo, siempre saldremos beneficiados de incluir el huevo en nuestra dieta.
