El uso excesivo de dispositivos electrónicos está afectando de manera alarmante la salud visual de los niños y adolescentes dominicanos. Según la Dra. Stephanie Vásquez, especialista en Oftalmología Pediátrica del Instituto Espaillat Cabral, uno de cada cuatro pacientes menores de edad que acude a una revisión presenta algún tipo de alteración visual.
“Esta realidad, que vemos a diario en consulta, es solo la punta del iceberg”, advirtió la especialista, quien explicó que síntomas como dolores de cabeza, ojos rojos, dificultad para concentrarse o acercarse demasiado a libros y pantallas suelen confundirse con problemas de atención o conducta, cuando en realidad pueden ser señales de un problema visual no diagnosticado.

El 83 % del aprendizaje depende de una buena visión
La visión es clave para el rendimiento escolar. “El que no ve bien, no aprende bien”, afirmó la doctora, destacando que el 83 % de la información que recibimos para aprender llega a través de los ojos. Un estudio reciente (2025) reveló que más de una hora diaria frente a pantallas incrementa el riesgo de miopía en la infancia, y si este tiempo se eleva a cuatro horas o más, el riesgo se multiplica.
“El problema no es solo la cantidad de horas, sino el tipo de uso. El uso pasivo, en multitarea o bajo luz artificial limita la capacidad del ojo para descansar y puede generar fatiga visual”, señaló Vásquez.
Luz natural y juego al aire libre: aliados contra la miopía infantil
Diversas investigaciones confirman que pasar tiempo al aire libre, expuestos a la luz natural, protege la salud visual y mejora la concentración, regula las emociones y favorece un mejor descanso.
“Incorporar al menos dos horas diarias de juego al aire libre puede transformar el comportamiento, el rendimiento académico y la calidad de vida de los niños”, aseguró la especialista.
Recomendaciones para proteger la visión infantil
La Dra. Vásquez ofreció pautas prácticas para prevenir problemas visuales en la infancia:
- Evaluación oftalmológica anual con un especialista en oftalmología pediátrica.
- Limitar el uso de pantallas a menos de una hora diaria en niños pequeños.
- Promover dos horas de juego libre al aire libre bajo luz solar natural.
- Detectar signos de alerta como enrojecimiento ocular, parpadeo excesivo, dolores de cabeza o pérdida de interés por la lectura.
- Integrar evaluaciones visuales en las escuelas como parte del proceso de inscripción o seguimiento académico.
Equilibrio entre tecnología y salud visual
“No se trata de satanizar la tecnología, sino de buscar el equilibrio”, concluyó la Dra. Vásquez. “Un niño que ve bien, aprende mejor. Y un niño que juega al aire libre, se desarrolla más plenamente. Esa es la visión que necesitamos fomentar como sociedad”.