La carne de chivo, un alimento básico en la dieta dominicana, había experimentado una escasez alarmante en 2022, con precios que alcanzaban los 350 pesos la libra. Sin embargo, dos años después, la situación ha dado un giro radical: la abundancia reina en supermercados y «chiveras», con precios de 290 pesos la libra para guisar, un ajuste significativo que beneficia tanto a consumidores como a productores.
Un plan estratégico para el relanzamiento
Este notable cambio es el resultado del Plan de Relanzamiento, Repoblamiento y Desarrollo del Sector Ovino-caprino de República Dominicana, junto a la novedosa campaña «Tamo en Chivo», impulsados por el Fondo Especial para el Desarrollo Agropecuario (FEDA).
Resultados concretos:
- Aumento del 35% en la producción caprina: Satisfaciendo la demanda nacional con un producto cárnico nutritivo y de origen local.
- Financiamiento accesible: 1.053 créditos blandos de 300 mil pesos cada uno, entregados a través del Banco Agrícola, a igual número de criadores en las nueve provincias fronterizas productoras de chivos y ovejas.
- Capacitación y formación empresarial: Más de 200 actividades de sensibilización, socialización y capacitación en todo el país, y siete grandes seminarios educativos para más de 8.000 productores.
- Modernización de las técnicas de crianza: Implementación de métodos avanzados que aseguran una mayor rentabilidad.
- Donación de ganado: 1.281 chivas y ovejas entregadas a jóvenes emprendedores, asociaciones y cooperativas de mujeres en todo el país.
- Mejora genética: Donación de 91 padrotes de alta genética e instalación del Centro Genético Ovino-caprino de Cumayasa para la producción de ovejas Katahdin.
Precios justos, mayor accesibilidad y beneficios para la salud:
- La carne de chivo para guisar se encuentra a 289 pesos en supermercados y 290 pesos en establecimientos especializados.
- El regreso del «chivo guisao», «chivo asao» y otros platos exquisitos a las mesas dominicanas.
- Inclusión de platos exóticos como la paleta de cordero, mofongo, croquetas y risotto de chivo en la oferta gastronómica de restaurantes.
- Alto valor nutricional de las carnes ovino-caprinas: ricas en proteínas, vitaminas B12 y B1, hierro, potasio, zinc y otros elementos esenciales para la salud.
Combate a la pobreza y generación de empleos:
- El Plan busca incorporar a familias de escasos recursos a la producción ovino-caprina, aumentando sus ingresos, generando empleos y contribuyendo a la reducción de la pobreza en zonas rurales.
- Préstamos blandos con un interés anual del 5%, un año de gracia y cuatro de amortización, diseñados para garantizar la puntualidad en el pago.
- Meta del 10% de beneficiarios jóvenes para asegurar el relevo generacional y evitar la emigración del campo.
Reducción de las importaciones y fortalecimiento de la cadena de valor:
- El incremento de la producción nacional permitirá satisfacer la demanda interna y del sector turístico, disminuyendo la dependencia de las importaciones.
- La crianza de chivos y ovejas no solo genera carne, sino también subproductos como leche, pieles y estiércol, completando una cadena de valor integral.
- En 2019, cerca del 80% de las carnes ovino-caprinas consumidas en el país provenían del extranjero.
- El Plan busca reducir significativamente las importaciones y posicionar a República Dominicana como un exportador de carne ovino-caprina.
Un futuro prometedor para la crianza ovino-caprina en República Dominicana:
El éxito del Plan de Relanzamiento, Repoblamiento y Desarrollo del Sector Ovino-caprino y la campaña «Tamo en Chivo» demuestra el gran potencial de este sector para contribuir a la seguridad alimentaria, el desarrollo rural y la economía dominicana en general. Con el apoyo continuo del gobierno y el compromiso de los productores, la crianza ovino-caprina tiene un futuro próspero en el país.