Luego de más de 30 años cosechando éxitos en Argentina siendo “Embajador del Merengue, el cantautor dominicano Jean Carlos se encuentra de gira promocional en la tierra donde inició la magia e inspiración para darle vida a sus sueños como artista.
Jean Carlos, quien es un referente de la música tropical, agotará una agenda de visitas a medios de comunicación en República Dominicana, destacando su trayectoria musical que consta de 24 discos grabados, de los cuales han sido disco de oro y otros de platino. En estos se incluyen también 5 DVD, con exitosos temas de reconocimiento a nivel mundial.
El intérprete que impregna pasión y los colores musicales característicos del caribe es el responsable de canciones como “No me cambies por él”, “Quiéreme” “Locuras mías”, “Tu amante secreto”; “El regreso”, “No tardes tanto”, “Búscate un hombre que te quiera”, y de los más recientes, “Locuras mías” y “Loco”. Asegura que unas de las claves de su éxito en la industria de la música, ha sido la innovación constante como artista, enfocado en complacer el gusto del público con letras de calidad.
Su traslado hacia la ciudad de Córdoba en Argentina propició la creatividad y expansión en la música, logrando conjugar un estilo propio de esa región con el merengue, sumado a esto un baile caracterizado por movimientos sensuales y coreografías, conquistando no tan solo el corazón de los argentinos, sino también el de toda América Latina e importantes regiones de Europa.
La historia de su formación en el arte se remonta a la edad de los 13 años cuando inició sus primeros pasos como cantante, interpretando baladas y boleros en fiestas de cumpleaños y bares. En la iglesia evangelista estudió teatro, poesía y canto. Más adelante, pasó a formar parte del grupo “La Dinámica”, allí permaneció por más de un año y luego pasó a formar parte de “La Dinámica Band”, una banda muy reconocida en toda República Dominicana. Trabajó con el también cantante merenguero Elvis Montilla fungiendo como como segunda voz.
Es a los 18 años cuando recibe la propuesta de un empresario para viajar a la República Argentina tras la recomendación del inmortal del merengue Johnny Ventura, para formar parte de un grupo el cual estaba dirigido por un solista, el negro Ángel Videla. Junto a tres compañeros también dominicanos, inician una nueva etapa en su vida y en la música popular de Córdoba.