En el marco del República Dominicana Fashion Week (RDFW) el joven diseñador presentó su primera muestra de ilustraciones de moda, donde demuestra sus conocimientos de las líneas, el color y las texturas a través del dibujo.
David Esteban Canals es un joven sordo que ha logrado comunicarse a través del lápiz y el papel, transportándonos a ese mundo mágico donde la mujer es la protagonista de sus historias vestida como una reina de corte europea, como una diva de alfombra roja o para asistir a una gala en un teatro.
Anny Abate, curadora de la exposición y maestra de diseño de David Esteban desde hace cinco años, describe que en los últimos años ha tenido una gran evolución cambiando los temas de su niñez por otros con rasgos más adultos, manteniendo como factor común su pasión por los personajes fantásticos y su perfección en los detalles.
Unas 32 ilustraciones están en las paredes de uno de los salones del hotel JW Marriott, así como cuatro vestidos que fueron confeccionados con los diseños de David Esteban, de tan sólo 19 años, para su madre Samantha Canals.
El primer vestido que se hizo para Samantha se confeccionó con un diseño que David hizo cuando tenía tan solo 13 años.
Antonio Esteban y Samantha Canals, padres de David estuvieron en la inauguración de la muestra explicando que “desde pequeño contaba historias y anécdotas completas a través de viñetas, su discapacidad auditiva no era obstáculo para expresarnos lo que sentía y quería, logrando hacer del dibujo su medio de comunicación favorito. Hoy día David es un gran conversador, sobre todo cuando se le da la oportunidad de hablar de su trabajo”.
Mientras que su maestra Anny Abate dice que “David no tiene límites creativos, he aprendido que no hay barreras para él, es un ser creativo sin paralelos, sabe lo que quiere, lo argumenta y lo defiende con el celo propio de quien vela por su territorio”.
Con las ilustraciones de moda, David Esteban interpreta el mundo que lo rodea con mucha ilusión, elegancia y fantasía, logrando tener con el espectador de su arte una conversación amplia sin necesidad de pronunciar palabras.
“En su trazo deja claramente expresada la exaltación a lo sublime; respeta la figura femenina y la trabaja con esmero y dedicación. Cada ilustración nos cuenta una historia, nos lleva a una época, representa un personaje visto siempre desde la profunda mirada de David, para concluir en un resultado de crecimiento legítimo avanzando poco a poco en una sociedad que hoy nos permite mostrar su capacidad de crear con autenticidad y firme convicción de que hay un espacio para él”, expresa Abate.