Por sus demostradas cualidades, la leche debe ser el alimento esencial en los programas sociales y especialmente de alimentación escolar de nuestro continente debido al excelente aporte nutritivo y la disponibilidad y equilibrio de sus nutrientes.
En el marco del Día mundial de la leche escolar 2016, fecha propuesta por la FAO, la Federación Panamericana de Lechería (Fepale) adhiere a las conmemoraciones y resalta la importancia nutricional y social de los programas de alimentación escolar y del vaso de leche escolar a nivel de las Américas.
Se destaca la excelente calidad de sus componentes; proteínas de alto valor biológico, calcio con una gran disponibilidad para el organismo, vitaminas A, D, E, K, vitaminas del grupo B, minerales como cinc, magnesio, potasio, fósforo; que conforman un paquete incomparable de macro y micro nutrientes esenciales para el adecuado crecimiento y desarrollo del ser humano desde su infancia, siendo insustituibles para los niños de edad escolar.
Esta excelente calidad nutricional convierte a la leche en un alimento muy apropiado y necesario en los programas de erradicación de la desnutrición que ya han puesto en marcha la mayoría de los gobiernos a nivel mundial.
Los programas de leche escolar representan una herramienta importante para la promoción del consumo de leche entre los más chicos, así como la adquisición de hábitos alimentarios adecuados en la niñez, aprovechando el marco institucional que brindan las escuelas. La alimentación que reciben los niños es influenciada por un entorno mucho mayor al exclusivamente escolar y estos programas contribuyen a establecer una sana costumbre de por vida.
En la mayoría de los países de América Latina, los programas de leche escolar han demostrado ser una excelente herramienta, no solo en lo nutricional y en la cultura alimentaria de la población, sino también para el fortalecimiento del sector productor de leche, generando beneficios colaterales muy importantes en el desarrollo rural y del país donde se aplican.
Aún queda mucho por hacer por la alimentación de los niños: nuestra América Latina tiene una gran capacidad para producir leche y brindarla a nuestra población.
Todos los representantes de la cadena láctea deben tomar el compromiso e involucrarse en asegurar la sostenibilidad de los programas de leche escolar a largo plazo.
FEPALE exhorta a los países que aún no cuentan con programas de leche escolar a implementarlos y a sumarse a las buenas experiencias que han demostrado los beneficios para la salud física e intelectual de los niños. ¡Sí a la leche!