Cusco, Perú.,Diciembre de 2025. — La excelencia médica dominicana brilló en el escenario internacional con el reconocimiento otorgado al doctor Julián Rodríguez, destacado especialista en Medicina Paliativa, durante la prestigiosa Premiación Internacional de Salud organizada por la Organización Internacional para la Capacitación e Investigación Médica (IOCIM).
Este importante encuentro reunió a médicos de renombre mundial, investigadores y líderes que están transformando el presente y el futuro de la medicina, convirtiéndose en un espacio de alto nivel científico y humano. En este contexto, la trayectoria del doctor Rodríguez fue distinguida con el “Premio al Médico por Logros en Pro de una Vida Mejor”, una distinción que reconoce no solo la excelencia profesional, sino también la vocación, la sensibilidad y la profunda humanidad con la que ejerce la medicina.
Visiblemente emocionado, el galeno expresó que recibir este reconocimiento representa un honor que lo llena de gratitud y felicidad, destacando que formar parte de un grupo tan selecto de profesionales reafirma su compromiso con una práctica médica basada en la dignidad, el alivio del sufrimiento y el acompañamiento compasivo.
“Acompañar, aliviar, dignificar y transformar vidas en los momentos más delicados es la razón por la que elegí este camino. Cada paciente, cada familia y cada historia han sido parte esencial de este crecimiento”, manifestó durante su discurso de agradecimiento.
Un referente de la medicina paliativa en República Dominicana
El doctor Julián Rodríguez es médico especializado en Medicina Paliativa, Proloterapia y Hospitalización Domiciliaria, con una sólida formación académica nacional e internacional. Es egresado de la Universidad Tecnológica de Santiago (UTESA) y cuenta con estudios avanzados en Cuidados Paliativos en la Universidad Cardenal Herrera, en España; una maestría en Hospitalización Domiciliaria en TECH, México, así como formación en Intervencionismo Musculoesquelético, también en territorio mexicano.
Su liderazgo lo ha convertido en pionero en la República Dominicana, al ser fundador de la primera clínica de medicina paliativa y del primer hospice del país, ambos avalados por certificaciones internacionales y reconocidos en tiempo récord por su impacto y calidad en la atención.
Más allá de su ejercicio clínico, el doctor Rodríguez dirige una fundación dedicada al acompañamiento de personas en etapa final de vida, extendiendo su vocación más allá de la consulta médica y convirtiéndola en una misión de servicio y amor al prójimo.
“Acompañar es un regalo que transforma tanto al que recibe como al que ofrece. Cada paciente es una historia sagrada que merece ser cuidada con compasión y humanidad”, afirma el especialista, reflejando la filosofía que ha guiado su carrera.
Con este reconocimiento internacional, Julián Rodríguez no solo enaltece el nombre de la medicina dominicana, sino que se consolida como una figura de referencia en la medicina paliativa, demostrando que la ciencia y la humanidad pueden —y deben— caminar de la mano.
